Comprendiendo los procesos

Cuando entendemos que los días y situaciones difíciles, son oportunidades para crecer y aprender, todo empieza a tener sentido pero cuando realizamos que Dios esta en control y que el en su soberanía utiliza esas situaciones para ayudarnos a fortalecer nuestro carácter

y para conocerlo más a Él, es cuando realmente disfrutamos de esos momentos no tan gratos. Es allí en ese momento cuando Él nos enseña la dependencia y se acerca de una forma mas intima para mostrarnos su amor. Cuanto me costo entender esto, es un proceso para llegar allí, pero ahora puedo decir que vale la pena y que no importa lo que tengas que pasar si al final estas dispuesto a aprender y a seguir hacia la meta. Durante este proceso, pude aplicar estos tips que me gustaría compartir con ustedes.

1. Toma tiempo

La pruebas tienen una duración y depende de cómo las manejamos, se pueden agudizar y empeorar. Es importante estar conscientes que estamos pasando por un momento difícil y darnos ese tiempo de sentirnos mal y también de planear de una forma organizada cuál será la mejor alternativa de salir de allí. Pedirle a Dios una guía es de vital importancia, definitivamente a través de la oración y acercarnos a Él (Isaías 55:6) de una forma intensa y dependiente nos ayudara.

2. Libre de culpa

Existen muchas pruebas unas ocasionadas por nosotros mismos, y otras porque otros nos hacen daño. Cualquiera que sea la razón, debemos ser libre de la culpa, para con los demás o para con nosotros mismos. El mayor mandamiento es amar a tu prójimo como a ti mismo (Mateo 22:39), y aunque no es fácil, hace que la carga sea más ligera.

3. Todo es cuestión de actitud

No importa cual haya sido la ofensa o la prueba, es básico tener una buena actitud a la hora de enfrentarlos. No es lo mismo enfrascarnos en la ofensa, ofendiéndonos y manteniendo un coraje que a la final es innecesario, en cambio si ejercemos el perdón (Colosenses 3:13) para los demás y para con nosotros mismos, nos liberara y nos dará la llave para nuevas oportunidades y porque no para nuevas pruebas.

El Señor nos perdono y redimió, además Él nos capacita y nos pule con las pruebas. Estas enseñanzas dependiendo cómo las tomemos serán de gran bendición para nuestra vida y para aquellos a los cuales alcancemos a través de nuestro testimonio! Lo mejor es: Seguir hacia adelante, viviendo el presente y por supuesto con los ojos puestos en Jesús.

Comparte, ¿con cuál de los tres tips te identificas?

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